Esta experiencia empezó con la necesidad de buscar un centro donde realizar las prácticas del Máster de ELE que estaba realizando online. En el momento de búsqueda me encontraba en Algodonales (donde viven mis padres actualmente), empecé a buscar por cercanía, y dí con esta academia en la que yo había asistido a clases de Alemán cuando estaba en el instituto y vivía en Prado. Anja (la directora) fue mi primera profesora de Alemán. Cuando contacté con ella para hacer las prácticas en su academia, todo fue sobre ruedas.
Personalmente, me apetecía pasar este tiempo en mi pueblo donde llevaba años sin vivir y al que por suerte me pude mudar el mismo día que empezaba el periodo de prácticas. Además, una de mis mejores amigas (mi Carmenxu) estaría trabajando allí durante el mismo periodo. Supongo que el hecho de que la academia esté en Prado, conocer a Anja, y tener a una amiga cerca, lo hace todo más fácil. Yo ya tenía experiencia dando clases de inglés, pero era la primera vez que enseñaba español a extranjeros. ¡Y me ha encantado!
Sin duda, lo mejor de esta experiencia ha sido compartir tiempo con los alumnos cuya actitud era la mejor que se podía desear.
Nos lo hemos pasado genial juntos, y sus palabras y detalles conmigo me lo confirman. Es increíble lo rápido que se crean conexiones con gente que viene con tantas ganas de relacionarse y aprender. Me han parecido un diez como personas y también como alumnos. Les voy a recordar siempre. Aunque haya sido un mes, y la mayoría de los alumnos pasaban una semana aquí, pasábamos las mañanas de clase (y también los ratos de desayuno en los que no parábamos de charlar) y las tardes de senderismo juntos (otra de las cosas con las que me quedo por volver a lugares que son superespeciales para mí por los recuerdos que me traen como la Torre Pajarete, y por conocer nuevos lugares que me han enamorado como el Salto del Cabrero -flipante-).
Lo que más me ha gustado ha sido compartir opiniones, reflexiones, pensamientos… sobre temas de lo más random. He alucinado con algunas preguntas y las conversaciones que surgían de ahí… Siento que nos conocíamos demasiado para el poco tiempo que habíamos pasado juntos, pero supongo que es fácil cuando sabemos escuchar y ponemos interés en las personas que nos rodean. Al final, hagas lo que hagas, y estés en la situación que estés, lo que importa son las personas con las que estableces una conexión, y por eso, precisamente, esta aventura se quedará en mi recuerdo.
En definitiva, me ha encantado la experiencia y volveré a pasar por aquí 🙂
Marta Hennawi